La receta del batido de plátano y canela es más que súper fácil. Sólo necesitáis 350 ml de leche, 2 plátanos maduros y canela (la cantidad de canela depende de vuestros gustos). Cortamos los plátanos, añadimos la leche y la canela y batimos todos los ingredientes con una batidora.
Después, para las galletas, cogí las ideas principales del libro Postres: Dulces recetas de pasteles y tartas ilustradas paso a paso de la Edición Marabout. La receta es la número 25 "Galletas con chocolate". Pero cambié algunas cantidades y añadí un ingrediente que no estaba en la receta: la leche. Y sobre todo, no puse chocolate, sólo me quedé con la idea de la vainilla.
Conseguí hacer unas 18 galletas con la masa, pero podéis hacer menos o más, dependiendo de la cantidad de masa que cogéis para formar las bolas que váis a poner en la placa del horno.
Ingredientes :
85g de mantequilla
90g de azúcar moreno
40g de azúcar glas
130g de harina con levadura
(Si no tenéis harina con levadura ya incorporada, habrá que echar unos 2 gramos de levadura)
Una pizca de sal
1 yema de huevo a temperatura ambiente
2 cucharaditas de aroma líquido de vainilla
leche
1° Derretimos la mantequilla en un cazo. Retiramos del fuego y dejamos que se enfríe un poco.
2° En un recipiente, mezclamos los dos azúcares.
3° Añadimos la mantequilla tibia y batimos con las varillas eléctricas hasta que los ingredientes se mezclen bien.
4° Añadimos la yema del huevo y las 2 cucharillas de aroma de vainilla. Mezclamos.
5° Mezclamos la harina con la sal (y añadimos la levadura si no la tenemos incorporada en la harina).
Añadimos a la mezcla y batimos. Como el resultado de la preparación no me gustó (se parecía más a la masa de un crumble) añadí leche.
6° Cubrimos la masa con un film transparente y la metemos en la nevera durante 10 minutos.
Mientras tanto, precalentamos el horno a 170°C y cubrimos una placa que va al horno con una hoja de papel vegetal.
7° Sacamos la masa de la nevera y formamos bolas del tamaño que queráis. Horneamos durante 14 minutos. Cuando las galletas están listas, las dejamos enfriar un poco sobre la placa antes de despegarlas.
Y aquí tenéis el resultado: ¡una merienda deliciosa!